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Tratamientos para la Ansiedad
La ansiedad es uno de los problemas más frecuentes que los profesionales nos encontramos en consulta. Alrededor del 15% de las personas tienen ansiedad en algún momento de su vida (OMS, 2016).

Psicólogos especialistas en ansiedad
Con este tratamiento para la ansiedad conseguirás

Identificar el problema
Entender cual es el problema y tener estrategias para solucionarlo

Exceso de preocupaciones
Dejar de darle vueltas a las cosas y disminuir las preocupaciones

Control de sensaciones
Sentirte mucho más tranquilo/a, sin sensación de agobio o tensión
Síntomas de la ansiedad
Síntomas físicos y emocionales
Son cambios que se producen en nuestro cuerpo a nivel fisiológico (dificultad para respirar, sensación de ahogo, taquicardia, mareo, nauseas, sudoración, agobio, tensión y presión en el pecho.
Síntomas cognitivos de ansiedad
Cambios que se producen en la manera que razonamos o pensamos las cosas: anticipaciones negativas sobre lo que va pasar, catastrofismo, inseguridad, problemas de memoria y concentración.
Síntomas comportamentales
Cambios en nuestras acciones y en nuestra manera de comportarnos (bloqueos, impulsividad, irritabilidad. También puede afectarnos al modo en que nos relacionaos con los demás.
Primera consulta gratuita
En Capaz Psicología en Madrid ofrecemos tratamientos psicológicos eficaces en el tratamiento de la ANSIEDAD, con profesionales con experiencia clínica y amplio conocimiento sobre el tema.
Elige el plan que
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Terapia para la Ansiedad Presencial
- – Sesión de 1 hora personalizada
- - Formato presencial
- - Primera cita totalmente gratuita
Terapia para la Ansiedad Online
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- - Sin moverte de tu casa
- - Primera cita totalmente gratuita
ANSIEDAD
La ansiedad es uno de los problemas más frecuentes que los profesionales nos encontramos en consulta. Alrededor del 15% de las personas tienen ansiedad en algún momento de su vida (OMS, 2016).
Aparece como una señal de peligro ante un hecho quela persona interpreta como amenazante, o que éste lo interprete como amenazante. Esto nos permite prepararnos para muchas situaciones importantes de la vida.. El problema es que no nos han enseñado a gestionarla de una manera adecuada y puede terminar siendo un problema.
¿La ansiedad es negativa?
No, la ansiedad en sí no es negativa. La ansiedad es un sofisticado sistema de supervivencia que nos prepara para afrontar situaciones peligrosas de dos maneras diferentes: luchando o huyendo. Es un proceso natural e inevitable que se pone en marcha ante situaciones nuevas o desconocidas. Lo patológico de la ansiedad no es en sí la propia reacción de ansiedad, sino que ésta se dispare innecesariamente, siendo una falsa alarma, cuando la situación no supone, en realidad, un peligro real para el individuo. Una mala gestión de ella es lo que hace que pueda ser negativa y nos limite en las diferentes áreas de nuestra vida.
Hay diferentes tipos de ansiedad. Los más comunes son:
- Fobias
Es un miedo o ansiedad intenso ante situaciones concretas. Por ejemplo, miedo a hablar en público, a ciertos animales, procedimientos médicos o dentales, lugares, comidas, viajar en un determinado medio de transporte, sangre, etc.
- Preocupación excesiva/Ansiedad generalizada
Se caracteriza por una preocupación intensa y ansiedad excesivas, persistentes y difíciles de controlar, sobre muchas y diferentes circunstancias de la vida diaria (familia, amigos, dinero, trabajo, estudios, manejo de la casa, salud, etc.) que causan un malestar significativo y deterioro en las diferentes áreas de la vida diferentes áreas.
Normalmente la preocupación es por cosas que son improbable que sucedan o que, si ocurren, son mucho más manejables y menos dramáticas de lo que se piensa. Suelen preocuparse constantemente y sólo dejan de lado una preocupación porque les aparece otra que ocupa su atención.
- Trastorno obsesivo compulsivo
Los estudios nos indican que prácticamente el 90% de la población general sufrimos con una frecuencia variable ideas intrusivas (Sevilla y Pastor, 2004).
Las obsesiones son ideas negativa intrusivas que causan fuerte malestar, tiempo (más de una hora diaria) e interfieren significativamente con la rutina normal de la persona, con su funcionamiento laboral, sus actividades o relaciones sociales.
Además, pueden ir acompañadas de compulsiones, que son acciones dirigidas a intentar reducir el malestar de las obsesiones. Por ejemplo, si se tiene el pensamiento de que un accidente le va a ocurrir a un ser querido, enciendo y apago la luz muchas veces creyendo que eso disminuye la probabilidad del accidente.
- Ansiedad social
La ansiedad o fobia social se define como un miedo intenso, persistente y excesivo en las situaciones sociales. Las situaciones temidas pueden ser hablar en público, hablar con personas del sexo opuesto, un grupo de personas desconocidas, en las que la persona experimenta el temor de hacer algo o comportarse de una manera que pueda resultarle humillante o embarazosa.
Las situaciones temidas se evitan o se soportan con una ansiedad o malestar intensos. Esta fobia interfiere marcadamente en la vida de la persona o produce un malestar clínicamente significativo.
Las fobias sociales pueden estar referidas a situaciones muy concretas (comer o beber en público, escribir delante de otros, etc.) o bien aparecer de forma generalizada ante numerosas situaciones sociales.
- Trastorno de pánico con o sin agorafobia
Un ataque de pánico es una súbita aparición de una gran cantidad de ansiedad, durante el que la persona experimenta un elevado temor a que ocurran desgracias personales muy dramáticas. Simultáneamente a los pensamientos aterrorizantes el sujeto nota sensaciones fisiológicas desconcertantes y muy desagradables. Por lo que, como es lógico, en estas condiciones la persona quiere librarse del malestar y sus reacciones irán encaminadas a buscar ayuda y seguridad. Las conductas más frecuentes suelen ser: ir a urgencias o hablar con médicos, tomar psicofármacos, distraerse, volver a un sitio seguro o cualquier otra conducta que corte o reduzca la crisis.
El trastorno de pánico puede ir acompañado de agorafobia. Es una ansiedad intensa sobre situaciones en las que es que se siente que es difícil salir de ella en caso de que se quisiera, como por ejemplo el uso del transporte público, estar en espacios abiertos estar en sitios cerrados o estar fuera de casa solo. Al final la persona evita estas situaciones quedando su vida muy reducida.
- Preocupación excesiva/ansiedad generalizada
La persona que sufre ansiedad generalizada puede fácilmente preocuparse y sentir con anticipación todas las «catástrofes» que imagina como si fueran muy probables, terribles o insoportables, por lo que movilizará todos sus recursos para evitar tales consecuencias (imaginadas y anticipadas), aunque sus reacciones sean poco realistas o claramente desproporcionadas; por ejemplo, una persona puede temer hasta sufrir crisis de pánico que hacienda detecte un error en su declaración de la renta y se vea envuelto en un proceso legal que le lleve a consecuencias graves: embargos, continuas inspecciones, e incluso multas o sanciones graves como la prisión.
Las personas con preocupación excesiva tienden a evitar siempre que pueden cualquier riesgo. Por ejemplo, que sus hijos vayan a un campamento con sus compañeros, por si tienen un accidente
La ansiedad generalizada somete a la persona a un miedo y tensión constantes y a problemas en distintos ámbitos, entre ellos en las relaciones con los demás que ven que el miedo es desproporcionado constante y que de alguna manera les termina afectando.
- Preocupación por la salud o hipocondría
La ansiedad también puede estar presente de manera específica en temas relacionados con la salud. Nos referimos a hipocondría a ese miedo o ansiedad intenso por contraer alguna enfermedad, la persona o sus familiares. Sin evidencia piensan que están muy enfermos o que van a contraer una enfermedad grave, viviendo cada día con ese malestar.